Costa Rica formula ferviente llamado a la acción solidaria y la democratización de las vacunas para hacer frente a la pandemia por el COVID19

  • La iniciativa C-TAP es una vía óptima para maximizar la producción de vacunas y otros tratamientos en respuesta a la pandemia, y atender la creciente y vergonzosa inequidad en la vacunación.
  • Es un hecho que se requiere un escalamiento de la capacidad de producción, así como la democratización de la distribución de las vacunas.

San José, 17 de abril de 2021. Costa Rica formuló un  ferviente llamamiento a la acción solidaria, el multilateralismo y la democratización de las vacunas para hacer frente a la pandemia por el COVID19.

Así lo expresó el Canciller de Costa Rica, Rodolfo Solano Quirós, durante una sesión especial de alto nivel del Consejo Económico y Social de las Naciones Unidas (ECOSOC),  a nivel de Ministros de Relaciones Exteriores, dedicada revisar aspectos clave de la respuesta internacional al COVID-19, y buscar las mejores soluciones para afrontar problemas urgentes de producción y distribución equitativa de las vacunas.

El Ministro costarricense puso de relieve varias de las iniciativas globales lanzadas por Costa Rica, tanto en el ámbito sanitario como financiero para afrontar los “devastadores sobre la vida y la salud humanas” causados por  la pandemia

Recordó que en mayo del 2020, junto con la Organización Mundial de la Salud (OMS), se lanzó una iniciativa para que se estableciera una plataforma de intercambio de información, conocimiento y tecnologías de salud esenciales para la prevención y el tratamiento de pandemias como la del COVID-19.

Detalló que la propuesta, denominada C-TAP, es expresión del multilateralismo consciente de que los grandes desafíos de la humanidad no pueden ser resueltos por un solo Estado,  y por ello planteó “la necesidad de acelerar conjuntamente el desarrollo y la producción de las herramientas terapéuticas necesarias para erradicar el COVID-19, entre ellas las vacunas, garantizando a la vez un acceso global a las mismas”.

“Ese repositorio de derechos aspira a convertirse en un mecanismo sostenible y un aliado permanente para combatir retos futuros, ante los cuales estaríamos mejor preparados. Compartir información, conocimientos, datos y otros recursos es la forma más poderosa de enfrentar situaciones globales y evitar la duplicación innecesaria de esfuerzos derivados de la ausencia de dicho intercambio”, añadió.

Costa Rica, al igual que muchos gobiernos y actores de sociedad civil en todo el mundo, sigue creyendo en la necesidad de impulsar la implementación de la iniciativa C-TAP  “como una vía óptima para maximizar la producción de vacunas y otros tratamientos en respuesta a la pandemia, y atender la creciente y vergonzosa inequidad en la vacunación”, puntualizó el Canciller Solano Quirós.

En este sentido, reiteró el “llamado urgente para intensificar los esfuerzos y unir las voluntades políticas a fin de lograr la plena implementación de esta y otras iniciativas globales que han surgido en el seno de la OMS, como el ACT Accelerator y la iniciativa COVAX Facility, que nos permitan construir una estrategia multilateral efectiva para acelerar la producción y el acceso a las vacunas que, en estos momentos, millones de seres humanos requieren con urgencia”.

“Es un hecho que se requiere un escalamiento de la capacidad de producción, así como la democratización de la distribución de las vacunas”, subrayó el Canciller de Costa Rica, al tiempo que recordó que, hasta ahora, “son precisamente las poblaciones de los países más pobres las que sufren la ausencia o extrema limitación de los programas de vacunación que podrían salvar sus vidas; de ellas, se estima que un alto porcentaje seguirá fuera de la cobertura de los programas de vacunación, al finalizar el 2021”.

La ampliación de las capacidades para la producción, distribución equitativa y asequibilidad y suministro de la vacuna para todos, implica una fuerte movilización de recursos financieros, que excede infinitamente las posibilidades de Estados cuyos desequilibrios fiscales previos a la pandemia se han visto agravados por la recesión inducida por el COVID-19 y sus nuevos gastos en salud, señaló el Ministro Solano Quirós.

En ese marco, recordó otra iniciativa, como es un Fondo de apoyo extraordinario para aliviar la economía COVID-19, conocido como FACE (por sus siglas en inglés)  catalizando el 0,7% del PIB mundial para proporcionar una financiación extraordinaria a los países en desarrollo que tienen un espacio fiscal y unas herramientas políticas limitadas para responder a la crisis, y mantenerlos en el camino hacia el cumplimiento de la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible ( ODS).

“Este firme llamado de mi país es un llamado a la solidaridad de todos los seres humanos, a verdaderamente no dejar a nadie atrás. Es indispensable que a tales propósitos se unan todos los actores clave del ámbito internacional, incluido el sector privado; todos hemos sido afectados por la actual crisis de salud debido al COVID-19, y para todos, es urgente encontrar soluciones conjuntas.  Somos una comunidad y debemos actuar como tal, apoyándonos para avanzar juntos. Este es el momento de la unión y la colaboración de todos, al servicio del bienestar de todos”, expresó el Ministro de Relaciones Exteriores de Costa Rica.

El Canciller recordó las palabras del presidente de Costa Rica, Carlos Alvarado Quesada, durante la 75 Asamblea General de las Naciones Unidas el año pasado, “la solidaridad y el multilateralismo cobran hoy un mayor sentido. El altruismo y los valores supremos deben orientarnos, no solo porque son los correctos, sino porque hoy tanto el interés altruista como el egoísta se unen en el entendimiento de que no habrá bienestar individual o nacional, si no hay bienestar compartido y mundial”.